En las primeras etapas de la vida nuestros pies, al igual que la mayoría de partes de nuestro cuerpo, están en continuo desarrollo. Por ello, elegir un calzado adecuado que nos acompañe en nuestras tareas cotidianas no es solo una cuestión de comodidad, sino de salud.
Una elección deficiente puede provocar desde incomodidades puntuales hasta problemas más serios: posturales, deformidades o lesiones que pueden agravarse y seguir apareciendo en edades adultas.
En el caso de niños y niñas que practican deporte, esta elección se vuelve fundamental, ya que un calzado inadecuado puede comprometer su rendimiento y, sobre todo, aumentar el riesgo de lesiones musculares, articulares o en el desarrollo de los huesos.
A la hora de comprar calzado deportivo infantil conviene tener en cuenta algunos consejos básicos. ¡Te lo contamos!
- Ajuste adecuado: la talla debe ser la indicada, sin que apriete ni que quede demasiado suelto. Para seleccionar el número perfecto se recomienda dejar entre 0,5 y 1 cm desde el dedo más largo hasta la punta del calzado.
- Flexibilidad: La suela no debe ofrecer una gran resistencia. Debe ser lo suficientemente flexible para permitir el movimiento natural del pie, pero también evitar desplazamientos dentro del propio calzado con un adecuado sistema de sujeción como cordones o velcros.
- Ventilación: Es preferible optar, sobre todo en meses con temperaturas más altas, con materiales que permitan la transpiración del pie. De esta manera favoreceremos que los pies puedan ‘respirar’. De no ser así, el sudor puede acumularse en la zona, crear un ambiente cálido y húmedo y será más fácil la aparición de ampollas y rozaduras, infecciones y mal olor.
- Absorción de impactos: Sobre todo para actividades deportivas, es clave que la suela cuente con una adecuada capacidad de amortiguación, para aumentar la protección de la planta del pie.
- Adaptado a cada tarea: Es indispensable utilizar un tipo de calzado diferente para cada actividad que queramos desempeñar. No es lo mismo un calzado para ir a la escuela que para jugar al fútbol. Incluso dentro de cada deporte es fundamental elegir uno adecuado a cada disciplina, ya que su morfología estará adaptada a los movimientos que realiza el pie en cada deporte concreto.
La infancia es una etapa crucial en la que se desarrollan hábitos y estructuras físicas que acompañarán a la persona durante toda su vida. Por ello, seleccionar adecuadamente el calzado correcto es una forma sencilla pero muy eficaz de cuidar la salud y el bienestar de los más pequeños. Por ello, si tienes dudas para saber cuál es el calzado que más se adecua a la actividad que vaya a realizar tu hijo o hija, acude al especialista podólogo para evitar riesgos en su salud.