Esta noche cuando el reloj marque las 00.00 horas daremos la bienvenida al primer día del primer mes del nuevo año. La familia se reunirá frente a una pantalla de televisión para recibir los próximos 365 días y desearse todo lo mejor para 2014. ¡Un año cargado de ilusiones!
Normalmente, desde la Puerta del Sol, aunque algunas cadenas, como Canal Sur, las retransmiten este año desde Granada.
Pero antes de que llegue ese momento, nos queda un día repleto de preparativos. Comenzamos organizando la cena, ¿qué manjares nos recibirá cuando nos sentemos a la mesa? Lo mejor de cada casa, lo que se ha reservado desde Nochebuena.
Los platos más suculentos se dejan para la noche que sirve de transición de un año a otro, donde se deja atrás lo que ha pasado durante los últimos doce meses y se espera con ilusión lo que depare el nuevo año. Pescado al horno, pollo relleno, una buena carne, algo de marisco que no se ha gastado durante las cotidianas comidas familiares de estas fechas. El plato fuerte, para el 31.
Cuando se termina la cena, comienza ese cosquilleo por dentro… Hay que recoger los platos, dejar la mesa limpia (en la medida de lo posible) para hacer hueco a las doce uvas de la suerte. Hay otras supersticiones, como llevar algo rojo o disfrazarse en algunos pueblos de Andalucía.
En otros, la Nochevieja se celebra dos veces, una en diciembre y otra en agosto, así que los nervios no son tantos. Pero siempre existe esa sensación de nerviosismo, preparando las uvas (o los cacahuetes o golosinas para quien no le guste) y esperando las imágenes del reloj.
Al final, la familia calla durante unos segundos y engulle las doce uvas mientras suenan las campanadas. Y, sin saber muy bien por qué, la alegría por terminar el año o la esperanza lo que vendrá invita a todos a brindar y a comenzar 2014 con buen pie y mejor cara.