Los lácteos son uno de los productos más nutricionales e importantes que existen en nuestra dieta y, en especial, en la de los niños, ya que alimentos como la leche y sus derivados son ricos y variados en nutrientes, necesarios para ayudar al desarrollo adecuado de los más pequeños. Por tanto, el calcio y las vitaminas que contienen no solo afectan al crecimiento, sino que proporcionan una serie de beneficios para la salud que los hacen indispensables para una alimentación sana y equilibrada, uno de los hábitos de vida saludables que fomenta la Copa COVAP.
Lo recomendable es tomar tres raciones de lácteos al día para ayudar a cubrir la necesidad diaria de calcio. Sin embargo, no hay que centrarse en un único alimento, pues lo aconsejable es diversificar su consumo. En este sentido, además de la leche, los yogures y el queso son fáciles de digerir y tolerar, ya que son una buena fuente de minerales debido a su alto contenido en calcio, fósforo y magnesio, pero también, la presencia de la lactosa (disacárido que es fuente principal de hidratos de la leche) y la caseína (principal proteína de la leche) favorecen la estabilidad y la absorción de estos minerales.
Por su parte, la leche contiene muchas vitaminas, como la D, la cual ayuda a los huesos, a los tejidos y a que nuestra piel no envejezca con facilidad. También cuenta con potasio, que ayuda a que nuestro sistema cardiovascular funcione a toda marcha y que el flujo nervioso sea más estable. Otro dato más es la ayuda que proporciona a nuestros riñones a la hora de purificar nuestro cuerpo, puesto que elimina el ácido úrico que se va acumulando en estos órganos paulatinamente.
Los beneficios de tomar lácteos
El consumo de lácteos y sus derivados añade una serie de ventajas y utilidades a nuestro organismo:
- El calcio que contienen protege los huesos y los fortalece, por lo que se trata de un buen componente que ayuda al crecimiento en la infancia y en la adolescencia.
- Además de absorber los minerales que forman parte de la dieta de los más pequeños, también elevan los niveles energéticos. Esto se debe a que incluyen carbohidratos, como la lactosa, que suministran al organismo importantes cantidades de energía para que la dieta sea lo más equilibrada posible, así como para ayudar al correcto funcionamiento del cuerpo.
- Uno de los objetivos de la Copa COVAP es acabar con la obesidad, un problema que afecta a muchos niños andaluces. Tomar lácteos de forma regular y manteniendo una rutina estable ayudaría a controlar el peso. No hay que olvidar que el calcio de la leche y sus variedades permiten controlar las grasas corporales.
- El riesgo de padecer problemas cardiovasculares disminuye. El consumo de lácteos mejora el metabolismo de los lípidos, sobre todo grasas animales. Esto ayuda a que el sistema se fortalezca frente a otras patologías como la hipertensión arterial, disminuyendo también el riesgo de sufrir infartos y otras enfermedades.
- La leche permite una buena flora bacteriana intestinal, protegiendo tu cuerpo de enfermedades y bacterias dañinas gracias a ello. Además de facilitar que se sinteticen las vitaminas del complejo B para ayudar a tu piel y otros órganos.