El ex jugador de baloncesto Fernando Romay vuelve a ser uno de los padrinos en esta séptima edición de la Copa COVAP, que viene respaldando desde el primer año en que el baloncesto se incorporó a esta iniciativa deportiva y educativa.
Fiel a su compromiso con el deporte, el coruñés tiene un palmarés que asusta: plata olímpica con la Selección Española de Baloncesto en los Juegos Olímpicos de Los Ángeles (1984); mientras que con el Real Madrid ha conseguido 2 Copas de Europa, 3 Recopas de Europa, una Copa Korac, 2 Intercontinentales, un mundial de clubes, 7 Ligas ACB y 5 Copas del Rey. Suficiente para certificar que Fernando Romay, además de ser una gran persona con mucho sentido del humor, también ha sido un profesional sobresaliente en la cancha.
El exdeportista lo tiene claro a la hora de repetir como padrino porque apuesta por iniciativas deportivas y educativas como esta, ya que “es una copa singular con siete ediciones y no ha perdido en absoluto ese carácter educativo que tiene a la hora de enseñar valores”, una cualidad muy destacada para el exbaloncestista español al estar “por encima de la competición”.
Al igual que los niños y niñas que participan en la presente campaña, Fernando Romay ha tenido importantes referentes cuando era joven, incluso tuvo la oportunidad y la suerte de jugar con algunos de ellos. Jugadores que le precedieron como Vicente Ramos o Juan Antonio Corbalán, entre otros. De ellos, lo que más ha aprendido, según destaca, es que “no dejaban de ser ellos mismos a favor del equipo y siendo ellos mismos formaban ese equipo”. Esa fortaleza moral que describe y que “hacía grandes a estos jugadores es la misma que se está dando en esta Copa COVAP».
Este año el objetivo volverá a ser inculcar valores deportivos y hábitos de vida saludables. Esta esencia es la que ha encandilado al que fuera pívot en el Real Madrid, empezando por el compañerismo, el acatamiento de normas y el espíritu de superación. Sin embargo, resalta sobre todo la ilusión, a lo que añade que en estos tiempos “las cosas importantes hay que trabajarlas mucho porque son las que van a valer para toda la vida”. En este sentido, y a modo de defensa de su deporte favorito y que tantos éxitos le granjeó, asegura que el baloncesto fomenta la “capacidad de crear esa ilusión”.
Uno de los temas que se abordarán en la séptima edición será el acoso escolar, un problema que a día de hoy sigue siendo una lacra y en el que se están invirtiendo muchos recursos para erradicarlo y prevenirlo. Para Fernando Romay es importante que padres, entrenadores y tutores tengan control sobre los niños y niñas a la hora de saber cómo actúan, cómo son y lo que hacen. “Se trata de ser partícipes de sus padecimientos y alegrías, es decir, conviviendo con ellos, ya que es eso lo que hacen los padres”.
Por último, no ha querido despedirse sin antes dar un consejo a todos los niños y niñas que participan este 2019 en la Copa COVAP: “Que se diviertan, que la disfruten a tope, ya que es un hecho increíble que estén aquí y lo que importa es vivirla”.